Las conductas de riesgo se deben prevenir desde la infancia y es de vital importancia transmitir a los alumnos pautas de comportamiento adecuadas que aseguren que en el futuro tomen las decisiones correctas con el consumo de diversas sustancias y drogas. En dicha labor, por lo tanto, la actitud y el compromiso de la Tecnica 40 y sus docentes es fundamental para la comunidad escolar.